La fimosis se define como la imposibilidad o dificultad de la retracción de la piel (prepucio) que recubre el extremo del pene (glande) debido a una estrechez del orificio del prepucio. Lo normal es que el glande pueda descubrirse para poder asearlo en estado flácido y para tener relaciones sexuales placenteras.
fimosisLa operación de fimosis es una de las intervenciones más frecuentemente realizadas en los hospitales infantiles de nuestro país y suele realizarse como cirugía ambulatoria.
Procedimiento
La intervención de fimosis (o circuncisión) se refiere a la excisión quirúrgica de parte o de todo el prepucio. En algunos casos puede realizarse una intervención de fimosis o circuncisión “voluntaria” por razones religiosas fundamentalmente. Sin embargo, en la mayoría de casos se realiza cuando existe necesidad de tal intervención.
Realizado sin anestesia es un procedimiento doloroso, mientras que la anestesia local puede reducir casi totalmente el dolor durante e inmediatamente después de la intervención. La anestesia general puede ser necesaria en niños más mayores.
Se suele realizar a partir de los tres años de edad, pues antes, la mayoría de las estrecheces prepuciales son reversibles.
Aparte de solucionar el problema causante de la intervención, este procedimiento parece reducir el riesgo de infecciones del tracto urinario, así como el de cáncer de pene, prácticamente desconocido entre los hombres circuncidados, aunque en cualquier caso es un tipo de cáncer muy poco frecuente.
Cuidados posteriores
Tras la intervención suele colocarse un apósito sobre el pene que se cae por sí mismo o es retirado a los 2 ó 3 días. La cabeza del pene puede tener un aspecto como tras un rasguño y puede formarse una costra. El proceso de curación se desarrolla durante unas dos semanas.
Con objeto de proteger la zona de la cirugía, tras la intervención debe evitarse montar en triciclo o bicicleta o en otros juguetes en los que se monta a horcajadas, durante unas pocas semanas.
Fuentes:
medicina21.com