El nuevo tratamiento ofrece resultados tan efectivos como la cirugía convencional pero con menos complicaciones
El Salvador.- Los problemas de hiperplasia benigna de próstata (HBP) pueden ser tratados con el nuevo láser verde, mediante la vaporización fotoselectiva prostática, una terapia que promete resultados tan efectivos como la cirugía convencional pero con menos complicaciones y efectos secundarios.
De acuerdo con el doctor José Salim Daabub, cirujano urólogo, este tratamiento es óptimo para pacientes que tienen una obstrucción causada por un crecimiento de la próstata, siempre que esta no sea maligna.
“Se tiene que estar seguro de que no hay cáncer y si hay una sospecha es mejor realizar una biopsia antes, porque a diferencia de los otros métodos aquí no se tienen tejidos para mandar a examinar. Esto se debe a que lo que se realiza es una fotovaporización, es decir el tejido se hace vapor, se esfuma”, explica.
Procedimiento
Para la aplicación del láser verde se puede realizar una anestesia regional (epidural), general o sedación.
Luego por medio de un endoscopio y a través del conducto de la orina se accede a la próstata, hay una mira y una luz roja que indica el lugar donde caerá el rayo verde y la próstata comienza a evaporarse. Al mismo tiempo se cierran los vasos sanguíneos (fotocoagulación) por lo que no se produce sangrado.
Cuando acaba el procedimiento suele dejarse una sonda que se retira aproximadamente a las 12 horas.
Entre los efectos secundarios, el paciente “queda con ardor, lo cual es normal , también presenta mal de orín, igual que si se hubiera hecho la intervención convencional. Pero es algo soportable y que se puede tratar con medicamentos. Eso ocurre mientras el tejido se desinflama y se recupera de la quemadura del láser”, explica Daabub.
Si bien hasta hace algunos años, este era un procedimiento caro, Daabub destaca que al tratarse de manera ambulatoria los costos se reducen significativamente.
Además ofrece otras ventajas con respecto a la cirugía tradicional, como el hecho de que se reduce el tiempo de intervención y disminución del riesgo de sangramiento.
El láser verde produce una vaporización de uno a dos gramos de próstata por minuto. De ahí que el tiempo del procedimiento varía dependiendo del peso de la próstata. “Una de unos 100 gramos se puede vaporizar en una hora aproximadamente”, explica el especialista.
Por otro lado, el paciente queda sin sonda y puede regresar a su casa el mismo día, mientras que con el método convencional debe permanecer ingresado al menos tres días. Adicional a esto, el paciente puede reincorporarse a sus labores en tan solo 10 días.
Fuente: elsalvador.com